La corriente en chorro se desplazó al norte en el último siglo

La corriente en chorro se desplazó al norte en el último siglo

La corriente en chorro y con ello, los trenes de borrascas, se desplazó al norte durante el último siglo en el hemisferio norte.

Una investigación constata que entre 1871 y 2011, el movimiento invernal promedio en la latitud de la corriente en chorro sobre el Atlántico norte se trasladó de 44° a 47° norte.

También se detectó un aumento de la velocidad de traslación del Jet Stream y del gradiente de presión entre el ecuador y el Ártico.

El deshielo de Groenlandia altera ya la circulación oceánica

El deshielo de Groenlandia altera ya la circulación oceánica

Una investigación de la NASA concluye que el deshielo Groenlandia altera ya la circulación oceánica.

Desde 1985 la capa de hielo y nieve groenlandés, la segunda más extensa en el mundo tras la antártica, ha perdido una superficie aproximada de 5.091 kilómetros cuadrados. Además, este hecho se ha acelerado desde los años 1990.

A consecuencia de este deshielo, grandes volúmenes de agua dulce han llegado al Océano Atlántico, lo que ya empieza a modificar la circulación oceánica habitual.
Y, en cualquier caso, los científicos creen que el impacto en el clima es aún pequeño respecto a las futuras implicaciones que aparecerán, sobre todo contando con que el derretimiento irá a más.

Se reduce la capa de nieve estacional del hemisferio norte

Se reduce la capa de nieve estacional del hemisferio norte

Un estudio de investigación ha constatado que la capa de nieve estacional del hemisferio norte se está reduciendo de forma significativa en las últimas décadas.

Las observaciones realizadas por científicos del Darmuth College demuestran que el calentamiento global ha provocado una reducción de entre un 10 % y un 20 % por década en el suroeste y noreste de Estados Unidos, así como en amplias áreas de Europa central y oriental.

La corriente en chorro se desplazó al norte en el último siglo

Un estancamiento de la circulación atmosférica

Un estudio de investigación ha detectado un estancamiento de la circulación atmosférica en el hemisferio norte, como consecuencia del calentamiento global del planeta.

El trabajo explica que el retroceso de la capa de nieve y el aumento de la temperatura global está ralentizando la corriente en chorro, lo que provoca que las situaciones atmosféricas se estanquen.

De esta forma, las situaciones meteorológicas de tiempo extremo, ya sea seco, frío, caluroso o lluvioso, está aumentando al estacionarse los patrones atmosféricos globales.

Descubren un vínculo entre tiempo oceánico y clima

Descubren un vínculo entre tiempo oceánico y clima

Un grupo de investigadores ha hallado una prueba que vincula el tiempo meteorológico oceánico con el clima global atmosférico.

Es la primera vez que los científicos son capaces de asociar pautas meteorológicas oceánicas similares a las terrestres.

Se trata de una vía muy interesante para comprender cómo la energía oceánica se traspasa al sistema atmosférico terrestre.

La corriente en chorro se desplazó al norte en el último siglo

La corriente en chorro se acelera

Una investigación indica que los vientos máximos de la corriente en chorro aumentarán 2,5 veces respecto a la media con el incremento de la temperatura global del planeta.

Dado que este canal de vientos en alta latitud que circula por los dos hemisferios de la Tierra se genera gracias al contraste entre el aire frío y denso de los polos, respecto al cálido y ligero de los trópicos, más la rotación del planeta; el aumento de la temperatura de nuestra atmósfera está propiciando y favorecerá, un contraste mucho mayor y, por tanto, el aumento de la velocidad del jet stream.