Desastre humanitario en Afganistan, inundaciones y enormes corrimientos de tierra. Los medios de comunicación hablan de un saldo aproximado de 2500 personas muertas o desaparecidas debido a enormes corrimientos de tierras, a los que hay que sumar decenas de fallecidos debido a las riadas e inundaciones anteriores.
De hecho, ambos fenómenos están relacionados; primero, un epidosio de lluvias torrenciales monzónicas que acarrearon graves inundaciones por diversas zonas del país y, después, y como fruto de estas lluvias, enormes deslaves o corrimientos de tierras que han sepultado pueblos enteros.
La figura que encabeza esta noticia es muy representativa de cuán abundantes han sido las precipitaciones entre el 25 y el 29 de abril de 2014.
A través de los datos recogidos por el satélite TRMM (Tropical Rainfall Measuring Mission, TRMM) del consorcio NASA/JAXA, se estima que en las zonas coloreadas del mapa con los tonos morados recogieron un total superior a 300 mm. de lluvia en ese periodo de tan solo 4 días.
Los datos son extremadamente significativos porque el mismo mapa que presenta los datos de precipitación también aporta claves fundamentales sobre la gran complejidad de su orografía, al tratarse de un país muy montañoso y con sistemas orográficos muy importantes con altitudes superiores a los 5000 m.
No en vano, se trata del macizo del Hindú Kush, la sección más occidental de las cordilleras del Pamir, el Karakórum y el Himalaya.
Unas precipitaciones tales como estas, generadas por fuertes tormentas, (tal y como se ha podido comprobar a través de los archivos de imágenes satelitales correspondientes a los días del episodio), debieron de provocar violentas escorrentías por las escarpadas pendientes de estos enormes sistemas montañosos, provocando aluviones salvajes.
A pesar de estos datos, si se consideran las anomalías (expresadas en mm de lluvia al día) en el conjunto de los últimos 30 días a nivel global, estas anomalías no son demasiado significativas en Afganistán, en comparación de otros lugares del mundo, como por ejemplo, el noreste del estado de Florida y el estado de Alabama, en EEUU, con su episodio histórico de lluvias torrenciales de hace pocos días.
Como fruto de estas lluvias torrenciales se han producido enormes corrimientos de tierra, siendo el epicentro de este tipo de fenómenos en el país, el distrito de Argo y, especialmente, una localidad conocida como Aab Bareek, sepultada bajo el barro y las piedras.
Entre muertos y desaparecidos, las cifras ascienden hasta 2500, según los medios de comunicación. Sin duda alguna un desastre humanitario increíble, y de origen natural.
Hemos tratado de buscar diferencias entre el día anterior y el de lo corrimientos de tierras, a través de los satélites meteorológicos, enfocando el área del desastre, pero no es posible debido a una combinación de superficies nevadas y nubosidad convectiva. Es perfectamente probable que estos corrimientos de tierra puedan terminar siendo observados por estos satélites meteorológicos, el TERRA y AQUA, de la NASA.
Lo peor de todo es que en el día de hoy se han vuelto a producir fuertes tormentas en el área, por lo que el desastre puede ser incluso mayor.
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