Imagen en modo visible de las 18 UTC de 21 de septiembre de 2008.

08.06.09. Esta es la imagen en modo visible de las 18 UTC del pasado 21 de septiembre de 2008. En ella podemos ver una enorme pelota convectiva, señalada con un puntero de color gris, desarrollada muy cerca de un marcado centro de circulación en niveles bajos (o, como se escribe abreviado en inglés LLCC, low level circulation center) (sigue).

Aquel caso fue muy llamativo también, porque ni siquiera se etiquetó al sistema como INVEST por parte del Centro Nacional de Huracanes, cuando los síntomas de tropicalización de la perturbación eran clarísimos (aparición de un núcleo cálido en niveles medios – bajos, identificado en los mapas de isotermas a 850 hPa; convección muy cerca de su centro, y vientos con fuerza de tormenta tropical cerca de su centro igualmente). Sin embargo, en aquella ocasión, la cizalladura vertical del viento fue el rol que jugó en contra de su desarrollo y, a la postre, fue el elemento que provocó el desacople de la convección y del centro en niveles bajos.

A pesar de todo, el remolino residual penetró en el Mar Mediterráneo a través del Estrecho de Gibraltar, trayendo acumulaciones de lluvia bastante importantes a las provincias de Cádiz, Málaga y Granada, con cantidades superiores a los 50 mm. en las tres provincias, algunas cercanas a los 100 mm.

Se hizo seguimiento pormenorizado de la perturbación en el subforo de seguimiento de ciclones tropicales de esta web. Recomendamos leer dicho seguimiento encarecidamente.

Estos dos casos, junto con el del huracán VINCE de 2005, pone de manifiesto que quizá esta zona del Atlántico Norte Oriental sea un área secundaria en que la formación de este tipo de perturbaciones es relativamente frecuente. Es por esto que no quitaremos ojo de ella, sobre todo en la segunda mitad del verano y durante el otoño, momento en que las aguas de la zona muestran sus valores más elevados, lejos sin embargo de los 26ºC teóricos para el desarrollo tropical. No obstante, ya sabemos que la tropicalización de perturbaciones no es algo que esté sujeto sólamente a latitudes y aguas tropicales.

En posteriores estudios, en los que ya se está trabajando, demostraremos que esta zona ha albergado gérmenes de ciclones tropicales importantes.