No es frecuente que una isla desaparezca del mapa, pero eso es lo que sucedió en octubre de 2018. Una isla remota, pero de importancia ecológica, desapareció en el mar tras uno de los huracanes más intensos registrados en el Pacífico Norte.

Huracán Wakala

Alrededor del 3 de octubre, el huracán Walaka pasó por las islas de Hawái, incluido un archipiélago, a unos 900 kilómetros (550 millas) al noroeste de Honolulu, conocido como el Monumento Nacional Marino de Papahānaumokuākea.

Las poderosas marejadas ciclónicas procedentes de Walaka inundaron los islotes poco profundos, uno de los cuales ha sido recuperado casi por completo por el océano.

Huracán Wakala en el Pacífico Norte Central, al suroeste de las islas Hawái. Imagen adquirida por el sensor MODIS del satélite AQUA de la NASA. 2 de octubre de 2018.

El sensor OLI (Operational Land Imager) del satélite Landsat 8 capturó estas imágenes en color natural de East Island el 11 de septiembre (izquierda) y el 13 de octubre de 2018 (derecha).

La tempestad arrasó la franja de 11 acres de arena y grava, y solo dos fragmentos de tierra han resurgido desde que ocurrió el huracán. Las marejadas ciclónicas también depositaron arena y escombros en la isla Tern, al noroeste de la isla este.

El sistema de arrecifes de coral «French Frigate Shoals»

East Island es parte del French Frigate Shoals, uno de los sistemas de arrecifes de coral más importantes de Papahānaumokuākea.

El archipiélago se formó hace millones de años cuando un «punto caliente» de alta mar creó volcanes submarinos, que eventualmente ascendieron a la superficie del océano para convertirse en islas.

Mientras que East Island estaba deshabitada por la gente, proporcionó lugares de anidación para las amenazadas tortugas marinas verdes de Hawái y lugares de cría para las focas monje en peligro de extinción, de las cuales solo hay 1400 en el mundo.

Los científicos creen que muchos de los animales ya habían abandonado la isla antes del huracán porque era el final de la temporada de cría de tortugas y focas.

Sin embargo, los nidos de tortuga no eclosionados probablemente fueron afectados. Los investigadores deben esperar hasta el próximo año para regresar a los islotes para un estudio más extenso del impacto en la vida silvestre.

Mientras tanto, un equipo de desechos marinos trabajó en la zona del Monumento a principios de noviembre para eliminar más de 160.000 libras de redes de pesca perdidas o abandonadas y de plástico que podrían poner en peligro a los animales marinos.

East Island no es la primera isla en desaparecer de los French Frigate Shoals.

El islote Whate-Skate se perdió debido a la erosión en la década de 1990, mientras que Trig Island se erosionó a principios de 2018, una ocurrencia común en los ecosistemas dominados por la arena.

Los científicos creen que los mamíferos se adaptaron a los cambios en el ecosistema en Whale-Skate y Trig al encontrar nuevos lugares de reproducción, por lo que esperan que suceda lo mismo ahora que la East Island se ha esfumado.