Tifones Lekima y Krosa

Si por algo se está caracterizando este verano de 2019 en el Hemisferio Norte, es por la sucesión interminable de fenómenos meteorológicos raros y extremos.

Dos históricas olas de calor en Europa, a la vez que se registraban fríos igualmente históricos en RusiaSiberia. Tormentas severas extremas en otros países. Tornados supercelulares en Amsterdam o Luxemburgo. Trenes de tifones en el Pacífico

Tifones «Lekima» y «Krosa» en el Pacífico Noroccidental.

Podemos comenzar con los dos ciclones tropicales activos del Pacífico Noroccidental: Lekima, que ya ha hecho impacto en China, y Krosa, en aguas abiertas todavía.

Según los datos oficiales, Lekima hizo impacto en las costas chinas con una intensidad equivalente a un huracán de categoría 2 en la escala de Saffir Simpson. Se considera como el más intenso en al menos un lustro. Se reportan al menos 22 víctimas mortales y decenas de miles de damnificados.

Hay que tener en cuenta que, antes de llegar a China, Lekima llegó a ser un supertifón, mientras pasaba cerca de unas pequeñas islas japonesas.

Tornados en Amsterdam y Luxemburgo.

Tal como analiza el meteorólogo francés Etienne Kapikian, de Météo France, el tremendo tornado de Luxemburgo se produjo a partir de una tormenta tipo supercélula, muy intensa y de corta duración. Su intensidad estimada fue de EF2 y causó numerosos daños el 9 de agosto.

Los vídeos que se hicieron virales en la red social Twitter son estremecedores. Algunos, aunque sería necesaria confirmación contrastada, hablan de un peligroso tornado multivórtice. Escenas más propias del Tornado Alley americano, que del ¡¡norte de Europa!!…

El mismo día, pero en Amsterdam, sucedía un fenómeno similar, sobre el agua y sobre tierra. Numerosos daños materiales.

Ciclones híbridos en las cercanías de la Península.

ciclón híbrido

El último, también acontecido hace un par de días. Y su imagen, arriba. Adquirida por el satélite AQUA (sensor MODIS) de la NASA. Algunos organismos la calificaron de tormenta subtropical, por su naturaleza híbrida, y por la fuerza de sus vientos desarrollados.

No obstante, al menos en este último caso, más bien parece una borrasca ocluída, fruto de un proceso de seclusión cálida, que de un ciclón híbrido.

No obstante, en el caso anterior ocurrido unos días antes, parece que la naturaleza subtropical del ciclón era más evidente. Incluso el meteorólogo Ángel Rivera se hizo eco del fenómeno en su magnífico blog…

A su llegada al Reino Unido, generó lluvias muy intensas, con inundaciones, así como vientos intensos.

En definitiva, y como decíamos en el titular, un verano 2019 bastante raro en lo meteorológico, en prácticamente todo el hemisferio… Y eso que no hemos hablado de los huracanes atlánticos, cuya nula actividad desde hace semanas, también llama mucho la atención…