Imagen visible de la monstruosa borrasca Xenia, satélite GOES-E, 26 marzo 13:45 UTC.

Xenia, una borrasca monstruosa, al otro lado del Atlántico Norte, frente a la Costa Este de EEUU. Bomba meteorológica que pasará a los anales de la Meteorología por ser una de las borrascas de más rápida profundización desde que se tienen registros.

En el foro de debate se le ha venido dando cobertura, siguiéndose toda su evolución, desde que se pronosticó su formación a través de los modelos meteorológicos que intuyeron este proceso con varias jornadas de antelación.

La increíble imagen que encabeza esta noticia muestra a la borrasca, etiquetada como «Xenia» por el medio especializado norteamericano The Weather Channel, en todo su explendor. Fue tomada por el satélite meteorológico GOES-E del NOAA en la jornada de ayer, a las 13:45 UTC.

Otro satélite, el GOES-13, revela con alta calidad la formación de dos mesovórtices coincidiendo con el centro de la depresión en su momento álgido (cortesía de Scott Bachmeier, de CIMSS).

Formación de dos mesovórtices en el centro de Xenia.

Según el Servicio Meteorológico Nacional, the National Weather Service, la presión mínima central que alcanzó la borrasca fueron 955 hPa.

Diagrama de fase de la borrasca, según el modelo GFS.

El diagrama de fase de la borrasca, mostrado arriba, muestra toda la evolución de la misma, respecto de la temperatura de su núcleo. Tal como corresponde a procesos de ciclogénesis explosivas, se produce la aparición de un núcleo cálido somero asimétrico, debido a la explosividad del proceso, que consigue atrapar burbujas de aire cálido en el núcleo de las depresiones que lo sufren, no procediendo este aire cálido esencialmente de la liberación de calor latente por la posible existencia de actividad convectiva.

Explicación gráfica del proceso sufrido por la borrasca, por el Servicio Meteorológico Nacional.

Como suele ser habitual desde que el Servicio Meteorológico Nacional de EEUU tiene presencia en las redes sociales, ayer publicó un gráfico resumen muy útil y didáctico sobre el proceso de ciclogénesis explosiva sufrida por la borrasca.

Allí los términos «bomba meteorológica» o «bombogénesis» utilizados para referirse a los casos más extremos de ciclogénesis explosiva, son ampliamente aceptados, y se intenta que sean utilizados apropiadamente.

En dicho gráfico se apunta el dato que conocemos ampliamente: ciclogénesis explosiva = ratio de profundización de la baja de al menos 24 hPa en 24 horas. Así, en este caso, el NWS apunta que se produjo un ratio que dobla al mínimo requerido; es decir, se produjo una profundización de ¡48 hPa en 24 horas!.

Altura significativa de ola, boya meteorológica 44141 del NWS.

El enorme gradiente de presión alrededor del centro de la profunda borrasca es tan intenso, que los vientos alcanzaron fuerza de huracán, provocando un fenomenal temporal marítimo. Esta madrugada una boya meteorológica situada en alta mar al este – sureste de Nueva Escocia ha reportado una altura de ola significativa de 16 metros.

Este oleaje podría extenderse por todo el Atlántico Norte en forma de mar de fondo, debido a la enorme amplitud del sistema depresionario.


Si encuentras esta información interesante, apóyanos en las redes sociales, compartiendo este y otros artículos, ya sea en facebook, twitter o google+.

En los iconos superiores, puedes hacerlo de forma sencilla y os lo agradeceremos.

La colaboración de nuestros lectores, en forma de opiniones, aporte de fotografías y/o datos, etc., es vital para nuestra supervivencia. ¡Anímate a colaborar con nosotros! Puedes hacerlo registrándote en nuestro foro de debate y participando como un forero más. Recuerda que descargándote la aplicación Tapatalk puedes navegar por nuestro foro desde tu smartphone y subir fotos y datos cuando quieras.