Previsiones de viento, intensidad y dirección, 31 enero 2014. Crédito: Puertos del Estado.

El Atlántico Norte, por enésima vez en esta temporada invernal, va a ser cuna de un fenomenal temporal marítimo, con olas gigantes que volverán a ser noticia y trending topic en las redes sociales.

En el foro de debate se ha abierto un hilo de seguimiento meteorológico especial para seguir todo este episodio, tanto por sus consecuencias en España, incluyendo a Canarias (también va a sentir los coletazos de este temporal), como sus consecuencias en otros lugares de Europa.

La figura que encabeza esta noticia, generada por Puertos del Estado, es representativa de la situación que se está comenzando a gestar en el Atlántico, y que vamos a detallar a continuación. En ella se observa el pronóstico de viento, para el 31 de enero, pasado mañana, con predicción de intensidad en colores y dirección con flechas.

Las zonas oscuras corresponden a vientos superiores a los 20 m/s, por encima de la fuerza 8 en la escala de Beaufort.

Análisis de superficie hoy, a las 06 UTC. Crédito: OPC.

El origen de este nuevo temporal marítimo debemos ir a buscarlo al otro lado del Atlántico, muy cerca de la Costa Este de los Estados Unidos, en donde se ha formado una borrasca en un extenso frente. Este frente ha provocado condiciones de tormenta invernal en este país, con fuertes nevadas, lluvia helada y heladas poco habituales en latitudes tan bajas.

Estas características podemos observarlas en el análisis de superficie, arriba, generado por el Centro de Predicción Oceánica del NOAA.

Imagen visible del frente y la borrasca incipiente, hoy a las 13:15 UTC. Crédito: NOAA.

En esta imagen captada por el satélite GOES-E a las 13:15 UTC de hoy podemos observar el frente y la borrasca incipiente, marcada en dicha imagen.

Esta borrasca se va a desplazar rápidamente hacia aguas abiertas a la vez que sufre un proceso de ciclogénesis explosiva, con una rápida intensificación.

Análisis de superficie previsto para las 00 UTC de mañana. Crédito: OPC.

Así, para la próxima media noche, la borrasca habrá bajado a los 994 hPa en su centro, ocupando posiciones cercanas a las costas de Terranova. Para entonces, tal como se indica en el análisis, ya estará comenzando a generar fuertes vientos en su flanco suroriental.

Análisis de superficie previsto para las 00 UTC del 31 de enero. Crédito: OPC.

24 horas después, su presión mínima central habrá bajado ya hasta los 956 hPa, ocupando una posición equidistante de Islandia y las Islas Británicas; es decir, su presión en 24 horas habrá bajado de 994 a 956 hPa, casi 40 hPa de diferencia.

Los vientos generados a su alrededor, especialmente en su flanco sur, serán vientos con categoría de huracán.

Análisis de superficie previsto para las 00 UTC del 1 de febrero. Crédito: OPC.

A las 00 UTC del 1 de febrero, la profunda borrasca estará ya muy cerca de Irlanda, sometiendo al conjunto de las Islas Británicas a un régimen de vientos huracanados que supondrán un alto riesgo de impacto en la sociedad por Fenómenos Meteorológicos Adversos. La Agencia Británica de Meteorología, Met Office, emitirá avisos, los cuales en estos momentos son de nivel amarillo según sus criterios de emisión.

Vientos y altura de ola en metros, previstos para el 1 de febrero, 00 UTC. Crédito: OPC.

En base al duro temporal de vientos con fuerz de huracán que se va a producir en pleno océano, los pronósticos de oleaje son bastante llamativos, de nuevo con olas gigantes de que pueden superar los 16 metros de altura.

Este valor en la figura del Centro de Predicción Oceánica se refiere a la altura de ola significativa, y es un valor medio de la ola más alta en una serie de tres, por lo que puede haber olas solitarias que superen estos pronósticos.

Predicción de oleaje para el 1 de febrero a las 00 UTC. Crédito: Puertos del Estado.

Los pronósticos de oleaje de Puertos del Estado deja clara la magnitud del temporal marítimo, y que algunos modelos como el GFS, también trasladan a las costas españolas, por lo que no sería extraño volver a ver avisos de nivel rojo, y estampas como las que dejaba el reciente paso de la borrasca MAYLA por el tercio norte peninsular.

Dado que ha vuelto a suceder, muertes, heridos y/o desaparecidos por imprudencias a la hora de ir a ver el oleaje, de nuevo es necesario hacer las recomendaciones pertinentes en estas situaciones: alejarse de los bordes de acantilados, precipicios, zonas donde las olas batan con fuerza y exista riesgo de arrastre.

Caer al agua con este oleaje en una zona de rocas es sinónimo de muerte segura, y muy desagradable.

En la red social Twitter, como de costumbre, se usarán los hashtags #FMA, en referencia a Fenómenos Meteorológicos Adversos y #olasgigantes. También, cuando el Departamento de Meteorología de la Universidad de Berlín le asigne nombre, se usará tal etiqueta.


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