Febrero de 2019 volvió a comportarse de forma cálida a nivel mundial. Los datos del Programa Copernicus del ECMWF nos dicen que fue el tercero más cálido de la serie histórica, solo por detrás de 2016 y 2017.

En el conjunto del Planeta, la temperatura estuvo 0,47 ºC por encima de la media de la serie 1981-2010, con desviaciones de más de 3 ºC en Europa del Este o Siberia, por poner dos ejemplos, mientras que en el otro extremo destacó Canadá y zonas cercanas de Estados Unidos, con anomalías negativas.

Anomalías térmicas acusadas en Europa

En la mayor parte de Europa durante febrero de 2019, las temperaturas se movieron por encima de los niveles normales.

Esta tendencia cálida fue particularmente aculada hacia el norte y el este del continente, con temperaturas especialmente muy altas en el oeste de Rusia y el sur de Finlandia.

Como hemos comentado en cazatormentas.com, una burbuja de aire cálido se extendió por buena parte del Oeste del continente durante el final del mes

Solamente se midieron anomalías de temperatura negativas cerca de los Urales, en una pequeña región del norte de Noruega y al noroeste de una zona que se extiende desde el sureste de Groenlandia hasta Svalbard.

Comportamiento de las temperaturas en otras zonas del Planeta

En el resto del Planeta el informe de Copernicus destaca que las temperaturas fueron muy superiores a la media en gran parte de Alaska, en el extremo oriental de Siberia y en los mares del norte.

Igualmente, destacan las anomalías térmicas positivas en una zona que se extiende desde el centro norte de Siberia hasta el noreste de China, en el sureste de los EE. UU. el oeste de Australia y en zonas de la Antártida.

¿Dónde fue el clima frío?

Fue complicado encontrar zonas del Planeta donde el termómetro estuvo por debajo de la media.

Además de Canadá y el noroeste de los EE. UU. las temperaturas estuvieron en zonas de Asia central, en gran parte del noreste de Siberia, el sureste de China, el noroeste de África, Afganistán, la Península Antártica y al noreste de Australia.

Por último, indicar que la temperatura del aire sobre los océanos fueron predominantemente más altas que el promedio, aunque también se observaron algunas regiones con temperatura inferior al promedio.