Científicos describen un nuevo fenómeno meteorológico en el Índico: los lagos atmosféricos
Un grupo de científicos ha descrito un nuevo fenómeno meteorológico en el Índico: los lagos atmosféricos.
Se tratan de charcos compactos de humedad que llevan agua a la costa de África oriental.
Por encontrar un símil a este evento, podríamos recurrir a los ríos atmosféricos que inciden en las costas de América desde el Pacífico en las europeas desde el Atlántico, que favorecen las lluvias intensas en esas zonas.
Cómo se manifiestan estos eventos
Los lagos atmosféricos se manifiestan mediante la presencia de vapor de agua lo suficientemente concentrado como para producir lluvia.
No estaría formado y definido por un vórtice, como la mayoría de las tormentas en la Tierra.
Y a diferencia de los ríos atmosféricos de flujo rápido, los lagos atmosféricos más pequeños se separan de su fuente a medida que avanzan a un ritmo lento hacia la costa.
Lagos atmosféricos en el Índico
Estos lagos atmosféricos comienzan a desarrollarse como corrientes de vapor de agua que fluyen desde el lado occidental del monzón del sur de Asia.
Posteriormente se aíslan y llegan a convertirse en objetos atmosféricos medibles y aislados.
En su posterior evolución, acaban flotando a lo largo de las regiones oceánicas y costeras en la línea ecuatorial en áreas donde la velocidad promedio del viento es alrededor de cero.
Identificando los lagos atmosféricos
Para catalogar estos eventos, los investigadores analizaron 5 años de datos satelitales.
Con ello lograron detectar 17 lagos atmosféricos que duraban más de seis días y dentro de los 10 grados del ecuador, en todas las estaciones.
También encontraron estos charcos de humedad más alejados del ecuador que, en ciertas ocasiones, se convirtieron en ciclones tropicales.
Alrededor de 1.000 Km de ancho
En la investigación se detalla que los lagos atmosféricos duran varios días seguidos y tienen una frecuencia de varias veces al año.
Haciendo una comparativa, si todo el vapor de agua de un lago atmosférico se licuara, formaría una extensión de agua de solo unos pocos centímetros de profundidad, pero de alrededor de 1.000 kilómetros de ancho.
Una cantidad de humedad más que suficiente para provocar lluvias importantes en las secas zonas del este de África, tan habituadas a los problemas por la sequía.
Se trata de una zona del planeta donde hay una escasez de conocimiento sobre los patrones meteorológicos predominantes.
Por ello, el conocimiento de estos charcos de humedad podría servir para realizar mejores pronósticos meteorológicos y de la sequía en la zona.
Los investigadores aún tienen muchas preguntas que responderse sobre la génesis y desarrollo de estos eventos atmosféricos que esperan resolver en los próximos años.
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