Las previsiones climáticas para las próximas décadas para buena parte de Europa Occidental podrían ser erróneas. Así lo afirma un trabajo de investigación que ha analizado los problemas que están teniendo los modelos para simular correctamente la presión atmosférica en Groenlandia.
El estudio científico advierte de que esos pronósticos pueden ser muy imprecisos dada la importancia de esta variable meteorológica en las proyecciones climáticas, de forma que la corriente en chorro podría ser más débil de lo que se cree en el futuro en el Hemisferio Norte.
La presión es realmente ligeramente menor
El estudio publicado en la revista The Cryosphere de la European Geosciences Union, comparó los datos reales con losdatos de simulación a lo largo de unperíodo de 30 años, hallando que lassimulaciones en promedio mostraron una presiónde aire ligeramente menor en laregión de Groenlandia.
Además, los datos reales mostraron un aumento significativo de la presión de aire alta (algo que se conoce en el campo climático como ‘bloqueo de Groenlandia’) durante los meses de verano.
Dudas en las proyecciones climáticas
A consecuencia de este hallazgo, os investigadores plantean importantes dudas sobre la precisión que puedan tener los pronósticos climáticos a largo plazo, en especial en Europa Occidental, zona del Planeta más sensible a los cambios atmosféricos en Groenlandia.
Si la presión de Groenlandia fuera más alta
Si la presión atmosférica en Groenlandia fuera mayor de lo que los modelos climáticos sugieren, el clima en el Oeste de Europa podría ser más variable y especialmente inestable.
Por ejemplo, los veranos húmedos récord en Inglaterra y Gales registrados en 2007 y 2012, podrían ser más frecuentes si la presión del aire de Groenlandia continúa fortaleciéndose en las próximas décadas, aunque la incidencia real es muy complicada de precisar debido a simulaciones climáticas regionales inexactas.
La Corriente en Chorro no estaría bien simulada
Los investigadores admiten que si bien existe una variabilidad natural en el sistema climático, el reciente calentamiento rápido en Groenlandia desde principios de la década de 1990 no está siendo completamente simulado por los modelos.
Ese error de estimación podría significar que los cambios futuros en la circulación atmosférica y en la corriente en chorro sobre el Atlántico Norte no estarían siendo bien simulados.
Los investigadores creen que conforme avance el siglo XXI la corriente en chorro se hará cada vez más débil.
La estimación de la banquisa ártica también en entredicho capa de hielo
Además, en este trabajo realizado conjuntamente por la Universidad de Lincoln (Reino Unido) y la Universidad de Lieja (Bélgica), se concluyó que los modelos actuales de fusión en la capa de hielo de Groenlandia pueden subestimar significativamente el aumento global del nivel del mar que se espera para 2100.
Este trabajo se ha tratado del primero en analizar y comparar sistemáticamente los datos del modelo del clima global y los datos de observación de los cambios en la presión del aire para la región de Groenlandia.
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