Una investigación constata que la temperatura ha subido en el Ártico 4 veces más que en el resto de la Tierra

Una investigación constata que la temperatura ha subido en el Ártico 4 veces más que en el resto de la Tierra durante los últimos 50 años.

Así lo constata un trabajo realizado por el Laboratorio Nacional de Los Álamos de Estados Unidos, con la participación de miembros de la Universidad de East Anglia y otros organismos internacionales.

Es un reflejo del proceso conocido como efecto amplificador Ártico, que magnifica en esta zona del planeta lo que ocurre en el resto del globo terráqueo.

La temperatura sube 4 veces más en el Ártico

El trabajo explica que dicha tendencia pasó desapercibida en todos menos cuatro de los 39 modelos climáticos existentes en la actualidad.

Los científicos examinaron ese conjunto de modelos sobre el cambio climático gracias a la colección colaborativa internacional CMIP6.

CMIP es una colaboración internacional de modelos climáticos que utilizan un conjunto compartido de parámetros.

Y en concreto, CMIP6 se ​​ha utilizado para crear el reciente Informe de Evaluación del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático.

Efecto Amplificador Ártico

La historia climática de la Tierra demuestra que siempre que nuestro Planeta se ha calentado o enfriado por el factor que fuera, el Ártico sufre dicha anomalía de forma amplificada por un factor de tres (aproximadamente).

Este proceso, se conoce como efecto amplificador Ártico y se trata de una retroalimentación positiva (o negativa) en la temperatura que se produce a partir de los cambios de la superficie del hielo marino y de la capa de nieve en tierra.

De esta forma, si la temperatura media de la Tierra desciende 3º C, el Ártico puede enfriarse entre 9 a 12 º o viceversa.

Causas del efecto amplificador Ártico

El factor más importante del efecto amplificador Ártico es la retroalimentación en la temperatura que se produce a partir de los cambios de la superficie del hielo marino y de la capa de nieve en tierra.

Es decir, cuando el hielo se derrite más luz solar llega a los océanos (o al suelo) causando aún más hielo se derrita.

Lo contrario también es cierto; cuando hay más hielo refleja más energía solar de vuelta al espacio, favoreciendo el enfriamiento en todo el Ártico.

Efectos de la subida de la temperatura en el Ártico

Esto conduce a la formación de más hielo marino y al aumento de la superficie nivosa en tierra.

Además, el deshielo del permafrost conduce a la liberación de metano y otros compuestos de carbono que pueden llegar a la atmósfera, provocando un calentamiento por ‘efecto invernadero’.

Y por otra parte el calentamiento también se refuerza cuando se mueven hacia el Norte los arbustos reemplazando a otras plantas inferiores tundra ayudando a derretir de forma más rápida a la nieve.

Lo contrario sucede cuando es la tendencia al enfriamiento de manera que la retirada de la cubierta vegetal provoca el efecto opuesto.